Herpes Zóster

Se trata de una enfermedad provocada por el virus Varicela Zóster; aunque se la conoce popularmente como “culebrilla”, éste nombre medicamente no existe.
Este virus es el mismo que provoca la varicela. Después de que una persona tiene varicela y se recupera, el virus permanece guardado -latente, inactivo- en el organismo.
Por razones que no se conocen del todo, este virus puede reactivar años más tarde causando herpes zóster, y siendo más frecuente esta enfermedad en personas mayores y en quienes tienen sus defensas disminuidas.
Los primeros síntomas suelen ser un dolor difícil de soportar, una sensación de quemazón u hormigueo en un sector del cuerpo, pero en un solo lado.
Luego aparece una erupción en la piel, la cual se enrojece y aparecen pequeñas ampollas (vesículas) que luego se transforman en cascaritas (costras).
El proceso completo suele durar 15 días.
En general afecta el tórax en primer lugar, pero pueden aparecer síntomas en la cara, brazos, piernas o en cualquier parte; siempre de un solo lado.
En algunos pacientes el dolor puede prolongarse por meses o incluso años, incluso habiendo desaparecido el sarpullido. A esto se lo llama neuralgia posherpética, y es la complicación más común y temida. Este dolor suele ser muy intenso y puede llegar a ser desesperante para el paciente e interferir en su vida diaria.
Cuando la “culebrilla” afecta el rostro puede ocasionar complicaciones graves en ojos y hasta comprometer la visión.

¿Esta enfermedad es contagiosa?

El herpes zóster no se transmite, pero una persona con “culebrilla” puede contagiar varicela a otra persona que no haya tenido esta enfermedad. Por eso, quienes no hayan padecido varicela no deben tener contacto con las lesiones que aparecen a causa de esta enfermedad.

¿Cuál es el tratamiento de esta enfermedad?

Como te contábamos, es popularmente denominada “culebrilla”, y también popularmente se conocen muchos remedios caseros.
Lo correcto es que veas a un médico que te indique un tratamiento realmente efectivo, que son ciertos comprimidos antivirales, tales como aciclovir, valaciclovir, famciclovir, que disminuyen el dolor y acortan la duración de esta enfermedad. Y a su vez, éstos se asocian a medicaciones específicas para el dolor.
El tratamiento oral se puede combinar con compresas y cremas locales para evitar la sobreinfección de las lesiones por distintos tipos de bacterias.
Está totalmente contraindicado y desconsejamos que las personas con “culebrilla” asistan a curanderos, ya que la colocación de tinta china u otros productos predispone a la sobreinfección de las lesiones.

¿Hay alguna manera de reducir el riesgo de contraer herpes zóster?

Existe una vacuna que resulta eficaz para reducir el riesgo de contraer “culebrilla” y el dolor que ésta puede dejar como secuela. La vacuna está indicada en los adultos de 60 años o más. Este grupo etario tiene más probabilidades de presentar herpes zóster y el dolor intenso que ésta provoca.
Consiste en una sola dosis de aplicación subcutánea.
Las personas con el sistema inmune debilitado no deben recibir esta vacuna.

EN CUALQUIER CASO, ES NECESARIO QUE VEAS A UN MÉDICO (clínico, dermatólogo y en algunos casos infectólogo) PARA QUE TE EVALÚE E INDIQUE UN TRATAMIENTO. ES MUY IMPORTANTE LA EVALUACIÓN Y EL TRATAMIENTO MÉDICO.

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